PASTOR ISRAEL VALENZUELA

Nezahualcóyotl, Méx., 24 de mayo. Una mujer le sacó los ojos a su hijo, de sólo cinco años, en represalia porque no los cerró para orar durante un ritual que celebraban siete personas –al menos cinco de la misma familia–, quienes aseguraban que este jueves vendría Dios y se acabaría el mundo.

María del Carmen Ríos García, de 23 años, confesó que su hermana, Lizbeth Ríos García, le ayudó para que, sobre la mesa de la cocina, en casa de su madre, le sacara con las manos los globos oculares a su vástago.

La agresión ocurrió entre las 8 y 8:30 horas en una vivienda de la colonia San Agustín Atlapulco, el barrio más marginado en este municipio del oriente del estado de México.

De acuerdo con las investigaciones, la mujer, de 28 años, les ordenó que se hincaran y que cerraran los ojos para empezar a orar, sin embargo, el niño se negó a hacerlo, por ello la mujer ordenó a su hermana que lo sujetara para sacarle los ojos.
Vecinos que escucharon los gritos del pequeño, llamaron a la policía, los que a las personas realizando un ritual. De acuerdo con las versiones de los paramédicos que acudieron al lugar las mujeres utilizaron una cuchara para extraer los ojos del niño, sin embargo, el fiscal regional en Nezahualcóyotl, Isaac Acevedo, aseguró que  la madre utilizó sus propias manos.

Otras personas que estaban en la casa tambi presentaban heridas y cortadas en diversas partes del cuerpo, presuntamente provocadas por un arma punzocortante, por lo que fueron trasladados a un centro aistencial.  Ante la gravedad de las lesiones del niño, los paramédicos solicitaron el apoyo de un helicóptero para trasladarlo al Distrito Federal.

Los presuntos responsables fueron puestos a disposición del Centro de Justicia por el delito de lesiones, privación ilegal de la libertad e intento de homicidio contra el pequeño, pues se presume no todos ellos participaron en la agresión.  Los detenidos son María del Carmen Ríos García, y sus hermanos Jesús y Lizbeth, de 25 y 22 años, respectivamente; Martha García Vargas, de 48; Ciro Ríos Benitez, de 57, al parecer abuelos del menor; Yesenia Maciel Chávez de 20, una menor de nombre Leticia “N”, así como José Antonio García Romero, de 21, quien dio aviso a las autoridades.

Fuente: Periódico La Jornada Viernes 25 de mayo de 2012, p. 34