Por esto es que debemos tener en claro que debemos ser diferentes al resto, hay muchas personas que nos están mirando, tenemos una nube de testigos, quienes deben dar fe que efectivamente nuestro cambio de vida es Radical. El Apóstol Pablo dice «Sed imitadores de mí, así como yo de Cristo», que en nuestras vidas nosotros también podamos decir imítenme a mí porque yo imito a Jesucristo. Debemos por tanto ser diferentes.
Eliseo es un hombre diferente, por ello la Mujer Sunamita le pide a su esposo hacer una habitación para que este hombre de Dios pernoctara en su casa. Un hombre diferente que tenía el respaldo de Dios, este hombre diferente le pide a su criado averiguar la necesidad de la mujer. Ud., conoce la historia. Amado hermano, cuando nosotros somos diferentes y cuando hay un cambio real en nuestras vidas, nuestros compañeros, amigos, vecinos, vendrán a ti para que des un consejo o una palabra de aliento. Ejemplo de orar por alguien
Todo esto va a ocurrir en la medida que nosotros tengamos un cambio en nuestras vidas y seamos efectivamente diferentes como Eliseo.
I: El Cambio es radical en nuestras vidas, cuando abrimos el corazón a Cristo y cuando dejamos que Cristo viva en nosotros.
1.- No basta solo con reconocer quien es el Señor Jesucristo, para decir que hemos cambiado, debemos seguir a Cristo vivir con Cristo y vivir para Cristo.
El mundo está lleno de hombres y mujeres que reconocen a Jesucristo, pero no tienen Cristo en sus corazones.
a.- Caminamos por fe, por la fe Abraham fue llamado padre de multitudes.
1.- Es necesario dar un paso decisivo para rendirnos totalmente a Cristo
a.- Cuando renunciamos debemos dejar que Cristo gobierne nuestras vidas
b.- Cuando renunciamos, no debemos vivir de emociones
2.- Renunciar, es confiar plenamente en Dios (v21), Bendito el varón cuya confianza es Jehová.
La palabra de Dios dice “El que no toma su cruz y sigue en pos de mí, no es digno de mi”
“Y ven, sígueme, tomando tu cruz”. Se cuenta que un joven agobiado por sus problemas, ora al Señor y le dice “Señor no puedo más con mi cruz es demasiado pesada y el Señor una vez más acudió al llamado y le contesta: Hijo mío, si no puedes con tu cruz, guárdala y escoge la cruz que tú quieras, la que tú puedas cargar. El joven dio gracias a Dios, dejó su cruz y encontró otra y le dice al Señor “quiero esa que está allá” y el Señor le contesta “Hijo mío, esa es la cruz que acabas de dejar”.
III.- El cambio es radical eficaz, verdadero cuando nos sometemos a Dios (v 22-30)
Jesús nos pide dar un paso decisivo.
3.- Someterse es permitir que Dios haga todo los cambios que el quiere, es dejar que Él perfeccione nuestras vidas, para tener claro que nuestra meta es Cristo y la vida eterna con El (vv 28 – 30). El Apóstol Pablo nos recuerda “…una cosa hago, olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está adelante, prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús” (Filipenses 3:13-14)
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PASTOR ISRAEL VALENZUELA 
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